Rawdon Glover, Director General de Jaguar, está liderando la histórica marca británica a través de una transformación radical. El cambio hacia la energía eléctrica y un nuevo lenguaje de diseño no ha estado exento de fricciones, pero Glover enfatiza la necesidad del cambio al tiempo que reconoce un paso en falso en la comunicación.
El nuevo Jaguar: casi listo para la producción
El primer modelo de próxima generación de Jaguar, un GT eléctrico de más de 1.000 caballos de fuerza, está a punto de finalizar. Glover confirma que más de 150 prototipos se están sometiendo actualmente a rigurosas pruebas, incluidas evaluaciones de aerodinámica, seguridad en caso de colisión y rendimiento. La versión de producción final se dará a conocer el próximo verano y se esperan entregas para finales de año.
Recuperando el ADN de Jaguar
El nuevo GT no se trata de replicar la gloria pasada sino de evolucionarla. Glover explica que las principales características de conducción de Jaguar (potencia refinada, comodidad a alta velocidad y dinámica atractiva) se han extraído deliberadamente de los modelos más emblemáticos de la marca. El objetivo es una verdadera experiencia “GT”, distinta tanto de los autos deportivos puros como de los cruceros de ultralujo.
Precios y posicionamiento: llenar el vacío del lujo
Jaguar apunta a un rango de precios básico de £117,000 a £120,000 para el modelo base. Sin embargo, las versiones totalmente personalizadas y de alto rendimiento podrían superar las 150.000 libras esterlinas. La marca pretende ocupar un espacio único entre el mercado premium convencional (alrededor de £110.000) y el segmento de ultra lujo dominado por Bentley y Rolls-Royce (más de £200.000).
La brecha de comunicación: por qué no se explicó el cambio
Glover admite que se cometió un error crucial al no articular claramente por qué Jaguar tuvo que cambiar fundamentalmente. Destaca que la historia de la marca es valiosa, pero la repetición no está en su ADN. La transición del E-Type al XJS sirve como precedente histórico para una reinvención audaz.
“No nos tomamos el tiempo suficiente para explicar por qué Jaguar tenía que cambiar. Cuando lo explicas claramente, la gente tiende a entenderlo”.
Jaguar apuesta a que un enfoque transparente de su futuro eléctrico, junto con un producto atractivo, ganará tanto a los leales como a los nuevos clientes. El próximo año será crítico ya que la marca se prepara para una revelación completa y el inicio de las entregas.
El cambio es más que simplemente un nuevo tren motriz; es un reposicionamiento deliberado de Jaguar dentro del panorama automotriz de lujo. El éxito de esta estrategia dependerá no sólo del vehículo en sí sino también de la eficacia con la que la marca comunique su visión al mundo.






















